EL ECO DE ALHAMA NÚMERO 7 | ECOLOGÍA Y MEDIO AMBIENTE |
Sierra de Gádor
como fuente de recursos.
EL AGUA
José Luis López Rodríguez
Geólogo (Universidad Autónoma de Barcelona)
Técnico Especialista Medio Ambiente (Universidad de Granada)
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Desde
la época en que los habitantes de Los Millares captaban y encauzaban
el agua de fuentes de la Sierra para llevarla a su poblado no hemos parado de
utilizar este recurso, con la diferencia que entonces se utilizaban sus excedentes
y hoy se extraen sus reservas.
El solo hecho
de que en varios artículos de esta publicación el nombre de esta
Sierra aparezca, es una señal inequívoca de la importancia que
esta gran masa de roca caliza tiene para nuestras vidas, y la de nuestros vecinos.
Para
hacernos una idea de esa importancia habría que señalar lo siguiente:
A
1 de Enero de 1994 la población de la provincia de Almería era
de 490.982 habitantes. En el Bajo Andarax, incluida la capital, el número
de habitantes era de 183.562, en el Medio y Alto Andarax 11.600 habitantes,
y las comarcas del Poniente y Alpujarra Almeriense 141.412, en suma 336.574
habitantes de la provincia viven sobre o en las faldas de esta Sierra, lo que
representa un 68% de la población. (Están excluidos los municipios
de Nacimiento, Ohanes, Bayárcal y Paterna, ya que beben de distintas
fuentes) Ese no despreciable porcentaje de población consume el agua
de abastecimiento procedente de esa Sierra, en su inmensa mayoría procede
de sondeos de captación, ya que las fuentes no son muy numerosas.
Hemos
de tener en cuenta, además, que la agricultura principal motor económico
de la provincia, sobre todo la comarca del Poniente, tiene como fuente de recurso
hídrico la misma que de abastecimiento urbano, es decir, el mismo acuífero,
ya que los acuíferos más superficiales se encuentran en su conjunto
o sobreexplotados, o con una gran carga de sales que les hacen inviables para
la agricultura. Más dependiente incluso, de su agua es la zona del interior
por el tipo de agricultura que allí se desarrolla, y más aun por
la casi nula posibilidad de obtener agua de otra fuente como podría
ser el mediterráneo a través de la desalación.
Llegados
a este punto habría que preguntarse ¿De dónde viene este
agua?¿De qué cantidad disponemos?, ¿Para cuánto
tiempo tenemos?; son cuestiones que muchos o algunos vecinos se hacen e incluso
a veces se autorresponden con respuestas de lo más variopintas y hartamente
acientíficas. El que escribe ha oído decir que el agua procede del legendario
Río Cañarete, de la lejana Cordillera del Cáucaso, y como
no de la vecina Sierra Nevada (no se puede descartar algo tan cercano y con
tantas posibilidades aparentes), los lugares de aportes serían tantos
como gente con la que se hable del tema, del que por otro lado todo el mundo
cree tener una información veraz.
Y
lo cierto y verdad es que el agua que contiene en su interior y que nos "cede"
o le "tomamos" procede solo y exclusivamente de parte de las precipitaciones
que llegan a su superficie. No existe conexión alguna con ningún
otro gran acuífero que le pueda ceder agua, como en algunas ocasiones
se comenta. Es un acuífero perfectamente delimitado y a su vez compartimentado,
aunque se ha de ver como un acuífero kárstico en su conjunto.
Si
algunas de las cuestiones que nos hacíamos más arriba tiene una
respuesta clara y corroborada científicamente es la procedencia del agua
que contiene el acuífero que la Sierra constituye, ya que las reservas
están un poco en entredicho, pues a pesar de ser una Sierra tan generosa
con sus pobladores, estos aun no han hecho los estudios pertinentes a fin de
conocer las entradas al sistema. En la actualidad y con los datos que se tienen,
haciendo balance de entradas y salidas, los niveles piezométricos deberían
de bajar aún más de lo que lo hacen, quiere esto decir que en
realidad los aportes a partir de ciertas cotas no se miden y deben ser mayores
de lo que siempre hemos pensado.
Para
no tener que ir al Cáucaso a por nuestra agua, tan solo deberíamos
tener claro unos cuantos conceptos y unas cuantas magnitudes, llegando a tener
claro eso quizá fuésemos más cuidadosos con el medio que
recoge el recurso y con el recurso en sí. Decir que la roca que constituye
en su casi totalidad Sierra de Gádor es "per se" impermeable,
pero la fracturación que posee debido a su historia geológica,
conjugada con su composición química (carbonato cálcico-magnésico)
la convierten en una auténtica esponja, que absorbe "toda"
el agua que se le viene encima. Esa característica de la roca de poder
absorber y de poder transmitir el agua es lo que le confiere la categoría
de acuífero, si a ello le añadimos la enorme extensión
superficial, resulta que tenemos el mayor "embalse subterráneo"
de agua de toda la provincia.
La
Sierra en su conjunto tiene una superficie aflorante de 915 Km2,
es esa pues la superficie receptora de agua de lluvia en el conjunto de toda
la Sierra, pero atendiendo a factores de vertientes, y subcuencas, la superficie
que realmente nos "correspondería" es bastante menor. Hay que
tener en cuenta que por la posición elevada de "nuestro sector"
con respecto a otros más sureños, está prácticamente
probada la cesión de agua subterráneamente de este al sector del
Poniente.
De
manera que sumando el agua que cedemos a otros sectores del acuífero
y el agua que extraemos mediante sondeos, el sector en el cual nos movemos es
deficitario. Es decir estamos utilizando agua de las reservas del acuífero,
estamos sobreexplotándolo.
¿Hasta
que punto? Veámoslo con cifras extraídas de los controles que llevan
a cabo el ITGM (Instituto Tecnológico y Geominero). El Borde Norte del
acuífero de Sierra de Gádor comprende el sector entre los municipios
de Alhama y Laujar, se incluye la Sierra de Beires, con una extensión
de 260 Km2, con una potencia de acuífero saturado
por encima de los 200-300 m, no se conoce la profundidad a la que se encuentra
la base impermeable. La gran densidad de fracturación y la existencia
de tramos de menor permeabilidad dan lugar a un comportamiento hidráulico
bastante heterogéneo, originando una compartimentación del acuífero,
no muy conocida por falta de referencias piezométricas.
La
explotación por bombeo en el sector entre Alhama y Laujar se realiza
por medio de unos 25 sondeos, de gran caudal, con una extracción total
de 11 hm3/a (hectómetros cúbicos al año). Las descargas
naturales controladas, por galerías y manantiales, pueden alcanzar un
valor medio anual de 9hm3, y se estima que, de manera incontrolada, se produce
una descarga lateral subterránea anual de unos 8hm3 hacia la propia cuenca
del Andarax, y de unos 8-16hm3/a hacia el Acuífero Inferior Noreste del
Campo de Dalías. En suma, se suponen unas salidas totales del orden de
36-44 hm3/a.
La
recarga media del conjunto anual sería de 33-42 hm3, cifra en la que
los retornos de riego son solo testimoniales. Por subsectores resultan excedentarias
las áreas de Sierra de Beires y de la Sierra de Gádor entre Padules
y Laujar, siendo deficitario el subsector de Alhama-Canjáyar, afectado
por fuertes descensos locales (de hasta 45 m en 7 años), se puede admitir
una aportación de reservas anuales de 1-2hm3 (lo que extraemos de lo
acumulado en épocas históricas)
Visto
lo anterior sería deseable que las administraciones e instituciones competentes
(administración central, autonómica y universidad) aunasen esfuerzos
para el estudio de las aportaciones reales y de la hidrodinámica del
acuífero, a fin de poder llevar a cabo una auténtica planificación
del territorio afectado y poder hacer un uso racional del recurso, asegurando
de esa manera el futuro de la población actual y de las venideras. Siendo
conscientes en todo momento de que las respuestas del medio natural, por lo
general, a las acciones antrópicas no son instantáneas, llevan
su tiempo y las suelen padecer los nietos de quien produjo el hecho.