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Los VIAJES de SALMERÓN
a Alhama
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Porfirio Marín Martínez
Médico especialista en Medicina Preventiva y de Salud Pública. Doctor en Medicina y Cirugía, centrando su investigación en el área de la historia de la ciencia. Desde sus orígenes, coordinador de la revista El Eco de Alhama. |
Con este trabajo se ha pretendido describir los viajes que realizó Nicolás Salmerón a su pueblo natal desde que fuera nombrado presidente de la I República Española en 1873 y las circunstancias que los acompañaron. No fueron muchos, pero suficientes e intensos como para dejar en la memoria de todos los alhameños que tuvieron el privilegio de conocerle la imagen de un hombre sabio, a la vez que la de un hombre sencillo y humano.
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Nicolás Salmerón.
Colección particular de Francisca Rodríguez Pérez |
La impronta que el alhameño más laureado dejara en estas visitas y todos los sentimientos y vivencias que las rodearon han sido transmitidos de generación en generación hasta nuestros días, cuando tenemos la oportunidad histórica de rememorar su figura con motivo del centenario de su muerte.
Hoy, hemos querido volver a refrescar esta
memoria consultando las noticias que sobre estos
viajes se comentaban en la prensa almeriense. Se ha intentando también
contextualizar estas estancias de Salmerón en Alhama con
algunos hechos históricos de ámbito provincial y nacional
relevantes.
Así, en 1874, Nicolás Salmerón, teniendo conocimiento de la gravedad de la enfermedad de su padre, Francisco Salmerón López (1), se trasladaría desde Madrid a Almena en el correo del día 3 de marzo, de paso para Alhama, habiendo salido a despedirle hasta dicho pueblo un considerable número de amigos (2). Permaneció en su pueblo natal hasta mediados de mes cuando pudo observar una mejoría de su padre (3), quien fallecería finalmente días más tarde, el 5 de abril.
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En enero de 1891 (contaba entonces 54 años de edad), tras cinco años del regreso definitivo de su exilio en Francia, vuelve Salmerón a Alhama (4).. Y lo hace con motivo de su gira electoral -por primera vez bajo el sufragio universal-, que junto a Azcárate y otros republicanos recorrieron media España, iniciándola en Madrid, pasando por Zaragoza, Barcelona, Sabadell, Valencia, Almería, Sevilla y Badajoz para acabar de nuevo en Madrid. No podía pasar de largo en su paso por Almería, a donde llegó el domingo 18 de enero, para acercarse a su pueblo el día 22 a estar con los suyos algo más de un día, que dio para ser recibido con todos los honores y ofrecer un mitin republicano. Fueron unas horas intensas tras diecisiete años de ausencia (5), donde, además de poder abrazar a su hermana anciana y a sus sobrinas, pudo comprobar el afecto, cariño y admiración que sus paisanos le rendían y que se extendía también a los demás pueblos de alrededor.
En el balcón del Ayuntamiento, ante
todo el pueblo, pronunció estas palabras: ¿Qué
he podido hacer yo, modestísimo obrero de la inteligencia,
para que me tributéis tales manifestaciones de simpatía?.
Poco he hecho; pero todo cuanto yo he realizado, lleva el
sello del alma de esta tierra. Todo lo he sacrificado por
el amor a la justicia y cuanto soy débolo tan sólo
al amor que respiré en este rincón de España,
en mi juventud (6). La emoción
en la plaza llegó al extremo, a lo que se unía
el repicar de campanas.
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Poco he hecho; pero todo cuanto yo he realizado lleva el sello del alma de esta tierra. |
Otra visita que motivó un caudal de emociones y júbilo en Alhama fue la que realizó Salmerón en 1901, quizás debido al hecho de que habían transcurrido diez años desde su última estancia en la localidad (7), porque era tal vez la primera vez que llegaba acompañado de su esposa y de parte de su numerosa familia, quienes pudieron comprobar la admiración y el afecto que le profesaba a su hijo predilecto todo un pueblo, y porque iban a establecerse quizás por primera vez en su propia casa, la misma que hoy conocemos a la entrada del pueblo. Se pudo comprobar en este viaje la manifestación espontánea de esos sentimientos, reprimida durante muchos años, por ver de nuevo a su paisano más universal, cuyas cualidades de honradez, sabiduría y tesón por luchar por unos ideales de progreso y democracia permanecían inquebrantables a lo largo de los años. Probablemente esa larga ausencia en Alhama se debió a los avatares
políticos y profesionales en los que estaba empeñado.
Así, Salmerón, el día 6 de agosto llegaba en tren hasta la estación de Gádor (8). Ya, en la estación de Fiñana fue recibido por un grupo de paisanos encabezada por Antonio Marín. En Gádor, además de varios grupos políticos de los pueblos limítrofes y de Almería, se habían desplazado multitud de alhameños en carruajes y caballerías. Al atravesar las calles de Gádor no faltaron los saludas entusiastas de las mujeres desde sus balcones pañuelo en mano. A su paso por el llano de Los Frailes (Huéchar), muchos de los acompañantes en la comitiva y otros que le esperaban desde ese lugar se adelantaron para avisar a los que le esperaban en el pueblo su llegada y los colonos de la Venta de Tollosa abandonaron sus tareas para saludar a Salmerón.
Paisanos: hoy es para mí el día de más júbilo de mi vida, al encontrarme entre vosotros. Nuestro pueblo imprime a sus hijos entre otros, dos grandes virtudes, el amor al trabajo y la modestia... |
A la llegada de Salmerón y su familia a la
entrada del pueblo le esperaban las autoridades junto
a la banda de música. Los vivas y aplausos,
acompañados de un estruendo de cohetes mezclados
con la música de los himnos nacionales, fueron
imponentes. Las muestras espontáneas de cariño
fueron tales que hicieron emocionarse a Salmerón
y a su esposa. Una vez que lograron entrar en su casa,
ante las insistentes peticiones de que Salmerón
saliera a hablarles desde el balcón, éste
lo hizo con las siguientes palabras: Paisanos:
hoy es para mí el día de más
júbilo de mi vida, al encontrarme entre vosotros.
Nuestro pueblo imprime a sus hijos entre otros, dos
grandes virtudes, el amor al trabajo y la modestia;
si yo poseo algo de esto, débolo
sólo al haber nacido en este
hermoso pueblo. Entonces las muestras
de alegría se desbordaron.
Casi un mes después de su llegada, la familia
Salmerón realizó una excursión
a la localidad vecina de Huécija. Lo hizo el
día 1 de septiembre (9) con
motivo de la feria del pueblo e invitado por su pariente
Eladio López Mizzi. Le acompañaban además
de cuatro de sus hijos, su esposa y varios amigos
de Alhama. Todos iban cabalgando en burro excepto
Nicolás Salmerón, que montaba un caballo
e iba el último. A la entrada de Huécija
le esperaban, además de sus parientes, el alcalde
y otras personas del pueblo. En su visita a la feria
a Salmerón le llamó la atención
los bailes y cantares que realizaba un grupo de gitanos,
con los que se fotografió. Por la noche hubo
cena en casa del Sr. Eladio y posterior baile
de postizas. De madrugada regresaron al pueblo.
Durante su estancia en Alhama, que se prolongó
por dos meses y seis días, Salmerón
recibió dos visitas de representantes políticos
de Almería, ya que no se acercó a la
capital durante este viaje. La primera fue el 6 de
septiembre y se trataba de una comisión del
Ayuntamiento de Almería. Fueron recibidos a
la entrada del pueblo por él y por autoridades
del Ayuntamiento local. Se les ofreció una
comida en su casa y regresaron a Almería avanzada
la noche (10). La otra visita llegó
dos días después por los "amigos
de Salmerón", o sea, los republicanos
almerienses (11). En esa reunión
manifestó: Almería
es republicana ...y si ahora no parece, el fenómeno
depende sólo de la quietud
de ustedes.
El regreso a Madrid de Nicolás Salmerón
y su familia se realizó el 12 de octubre. Tomaron
el tren correo en Gádor, siendo despedidos
por amigos y particulares, representantes del pueblo
de Alhama y una comisión republicana de la
capital. A esta última le manifestó
su satisfacción por el movimiento de organización
republicana que se había emprendido y se ofrecía
a regresar a Almería para formar parte de él
(12).
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La Fuente, uno de los lugares visitados por Salmerón en sus paseos por Alhama, junto al frontón, los parrales del Pago y la Piedra del Conjuro. Colección particular de la familia Rodríguez García. |
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Salmerón fue fiel a su palabra y al año siguiente, en 1902, volvió a Almería y a su pueblo natal, Alhama, para relanzar ese movimiento de organización republicana. Y lo consiguió, constituyendo quizás este viaje el de mayor significación política de todos los que realizó a ésta, su tierra. También fue muy corto en el tiempo, apenas duró veinte días. Llegó a Almería el 24 de septiembre. Lo hizo junto a su familia, siendo recibido por las autoridades en el propio andén de la estación de tren de Almería (13).
El acto fue apoteósico y todo
un homenaje a Salmerón, ya que llevaba once años
sin visitar la ciudad. Desde el balcón de la
casa del Sr. Rosendo Abad, ubicada en el Paseo del Príncipe
donde se hospedaría, entre otras palabras dijo
a los asistentes: No os puedo ofrecer nada... a
no ser prometeros mi constancia para trabajar por la
clase obrera...como los hijos de mi modesto pueblo hacen
fecundas las estériles rocas...
Durante su estancia en Almería tuvo ocasión de visitar el Instituto donde estudió el bachillerato, la Academia de Bellas Artes, el Ateneo y el Puerto. Los actos más importantes fueron una conferencia en el Círculo Literario (el día 26 y habló de filosofía, reivindicando entre otras cosas el papel de la mujer) y un mitin republicano en el Teatro de Variedades (el día 28, de carácter más político y donde intervino entre otros su hijo Nicolás), que fueron comentados tanto en la prensa local como en la nacional (14).
El día 29 de ese mismo mes -domingo por la tarde se desplazó Salmerón con su familia a Alhama en un coche particular, donde permaneció hasta el día 13. No tenemos noticias de las circunstancias que acompañaron su estancia de apenas dos semanas en su tierra natal. Para la despedida de Salmerón, en la estación de Gádor estuvo casi todo el pueblo de Alhama, además de comisiones de republicanos de la capital y de pueblos limítrofes (15). Casualmente, a partir de su regreso, hubo una fuerte polémica en el pueblo sobre la cacicada que llevó a cabo una Comisión Provincial al declarar "inútiles" a cuatro concejales republicanos, cuestión que se zanjó con una resolución ministerial restituyendo a los concejales expedientados (16). Seguro que Salmerón viviría con preocupación estas circunstancias de su pueblo desde Madrid (17).
No os puedo ofrecer nada... a no ser prometeros mi constancia para trabajar por la clase obrera... como los hijos de mi modesto pueblo hacen fecundas las estériles rocas.. |
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En 1903 Salmerón volvió a visitar Alhama y, como ocurriera en 1901, no realizó ningún desplazamiento a Almería. Y lo hizo como en los dos años anteriores aprovechando los períodos vacacionales del Congreso y por un período similar al de 1901, algo más de dos meses. Para entonces ya se había celebrado la Asamblea de Unión Republicana -25 de marzo- en la que fue elegido presidente. Llegó a su patria chica el 3 de agosto acompañado esta vez sólo por su hijo Exoristo. En esta ocasión no anunció su visita de forma que, tras abandonar el tren en Santa Fe, se dirigieron a Alhama a pié. Salmerón, sin el recibimiento de otras ocasiones, tras llegar al pueblo continuó su recorrido por él, visitó la fuente, cruzó por la carrera del molino, observó los verdes parrales cargados de uvas (quizás desde las Piedras del Conjuro, donde se dice que en una de ellas solía ir a sentarse y meditar). También aprovechó esos primeros días para pasear por la "Huerta Rosalía" -donde su hijo Exoristo pintaba paisajes-, hablar con los viejos amigos, que le tuteaban, y jugar al Paulo con ellos, sin olvidar la política, para lo que recibía los periódicos a través del correo que llegaba de la capital (18).
Pero no duró mucho esta relativa tranquilidad de Salmerón en su pueblo ya que, el primer domingo de su estancia en Alhama se trasladaba a Gádor para recibir a
su esposa Catalina, sus hijas Catalina y Rosalía, su sobrina Amparo, Madame Bergére, su hijo José, una nieta y su hijo político Sr. Pérez Díaz, que llegaban en tren desde Madrid. A la comitiva familiar se unió la que provenía de Almería (unos 30 coches con 200 personas) y la de otros pueblos limítrofes. El recibimiento en Alhama volvió a ser apoteósico y, de nuevo, Nicolás Salmerón debió de dirigir unas palabras desde el balcón de su casa a los alhameños allí concentrados (19). |
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Dos elementos del interior de la casa de Nicolás Salmerón: vitrina con el sombrero y las alpargatas que utilizaba Salmerón en sus paseos por Alhama y mapa de España en mármol, regalo de sus correligionarios, 1949. Colección particular de Cristóbal Tortosa Artés. |
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Al domingo siguiente Salmerón recibió una nueva visita, en esta ocasión por los republicanos del pueblo de Gérgal. Y a la semana siguiente los visitantes fueron de otros pueblos vecinos, como Fondón, Beires, Padules, Laujar (20), Berja, Alcolea y Alboloduy. Incluso hasta Alhama se acercaron republicanos de una localidad de Jaén, Cabra de San José. Salmerón recibió también una visita, ya en el mes de septiembre, de una representación del Ayuntamiento de Almería, presidida por el alcalde Fernández Burgos. También fueron muchos los telegramas que recibía en su estancia veraniega de distintas partes de España mostrando su adhesión. Alhama se convertía así en la Meca republicana (21). Fue aprovechado este ambiente de entusiasmo para constituirse en la localidad la Junta Municipal de Unión Republicana (22).
Una de las visitas singulares y que duró todo el día fue la realizada a primeros de septiembre por -tal vez- los cuatro amigos y correligionarios más cercanos de Salmerón en Almería, Lozano Bérgamo, Pérez García, Lozano Tenorio y José Jesús García. El viaje a Alhama se hizo en cuatro horas. Hubo ocasión para comer en la casa de Salmerón junto a toda su familia. Por la tarde se desplazaron al juego de pelota -por entonces el pueblo era el centro provincial de la afición a este deporte-. Posteriormente, dieron un paseo por el Pago. De regreso a casa, comieron en el cenador del jardín y, tras pasar una velada amenizada con bailes y cantos, regresaron a Almería en el carruaje (23).
Aunque Salmerón no se trasladó durante su estancia veraniega a Almería, sí lo hizo su hija Rosalía junto a Madame Bergére y otras amigas. Fueron para visitar la Alcazaba. Salmerón y su familia, adelantándose a lo previsto, regresaron a Madrid en el tren correo el 6 de octubre (24). |
En 1904 Salmerón de nuevo viajó
a Alhama. Llegó en tren a Santa Fe el día 23
de julio junto a sus hijos José y Exoristo. Y fueron
acompañados hasta el pueblo por varios correligionarios
de Almería desde la estación de Fiñana.
Dos semanas después se añadían al retiro
veraniego su esposa, Catalina, Madame Berguery otros
allegados de la familia. Al día siguiente, domingo,
Salmerón recibía una expedición de republicanos
de la capital, llegados en un tren especial a Santa Fe, desde
donde se desplazaron andando a Alhama (25).
En Los Cuatro Caminos, a los pies del pueblo, fueron recibidos
por los republicanos lugareños junto a la banda de
música del pueblo. Desde allí, se desplazaron
a la casa de Salmerón, donde el orfeón del Partido
Republicano entonó la Marsellesa y se tocó
el himno de Riego. Ante tal panorama, Salmerón salió
al balcón de su casa y pronunció un discurso,
saludando y agradeciendo la visita a los alhameños
y almerienses allí concentrados. A las doce de la noche
regresaron. Días después recibió la visita
de José Roche, jefe de los republicanos de Cartagena,
y de Nicolás Marín, médico alhameño
que ejercía en La Unión, a quienes manifestó
en la "Huerta Rosalía" -se denominaba así
en honor a su madre- que Alhama era un pueblo modelo,
cuyo Ayuntamiento y Alcalde, republicanos ambos, realizan
el ideal de la administración pública... (26).
Alhama es un pueblo modelo, cuyo Ayuntamiento y Alcalde, republicanos ambos, realizan el ideal de la administración pública... |
Salmerón junto a su familia regresó en tren desde Santa Fe a Madrid el día 21 de septiembre, para cogerlo dos días después en dirección a Barcelona, donde inició un viaje de propaganda republicana y en el que tuvo un recibimiento entusiasta (27). Y, para asombro de muchos, gracias al cinematógrafo "Luz" recién instalado en el boulevard de la capital, se pudo ver esa entrada triunfal catalana en Almería diez días después, animada por los acordes de la Marsellesa (28). Después visitó Tarragona y más tarde Zaragoza, donde tras un mitin Salmerón dio muestras de estar enfermo, haciéndose eco de ello la prensa (29).
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Panorámica de Alhama a finales del siglo XIX. Colección particular familia Salmerón. |
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En 1905 Salmerón visitó Alhama en dos ocasiones, ambas condicionadas en el tiempo por los importantes acontecimientos políticos del período estival. La primera la hizo días después de celebrarse la segunda Asamblea Nacional de Acción Republicana -el 15 de julio y de la que salió reelegido presidente-. De nuevo en su pueblo natal Salmerón continuó recibiendo visitas, como la que realizó el 10 de agosto una comisión del Ayuntamiento de Almería. Al día siguiente marcharía a Madrid para participar en un mitin de proclamación de los candidatos republicanos por Madrid en las elecciones de Diputados al Congreso que se celebrarían el 10 de septiembre.
Tras las elecciones, en las que Salmerón resultó elegido como en anteriores ocasiones por la circunscripción de Barcelona -donde estuvo días antes-, tenía previsto volver a su patria íntima, pero pospuso el viaje para ocuparse de los resultados electorales (30). Por la circunscripción de Almería saldría elegido por primera vez un republicano, José Jesús García. Ambos recibieron desde Alhama varios telegramas de felicitación (31). El día 16 de septiembre Salmerón se encontraba de nuevo en su pueblo. Pronto recibiría la visita de José Jesús García, quien confirmaría que Salmerón se encontraba bien de salud (32). El 14 de octubre Salmerón junto a su familia tomaron el tren en Santa Fe para regresar a Madrid (33), compartiendo viaje con el electo republicano almeriense.
Estaciones de tren (la de Almería, de Almería entre dos siglos, La Voz de Almería, 2000; y las de Santa Fe-Alhama y Gádor, de El Cable Inglés de Almería, Consejería de Cultura, 2007), pertenecientes a la Línea de Ferrocarril Linares-Almería en la que Nicolás Salmerón contribuyó desde varios ámbitos, que fueran escenario de entrañables recibimientos y despedidas en sus viajes a Alhama. |
En 1906 Salmerón no llegó a viajar a Alhama, a pesar de tener intenciones de hacerlo -como había ocurrido desde 1901 cada verano- tras una estancia en un balneario de la localidad francesa de Plombiéres, a donde marchó el 20 de agosto acompañado de su hijo Pablo. Su estancia en Francia, tras pasar por París, la prolongó hasta finales de septiembre, iniciando a renglón seguido su actividad política (34). No obstante, parte de su familia, como su hijo José Salmerón, viajaron al pueblo durante el período estival (35).
En 1907 nuestro alhameño más
ilustre tampoco pudo acercarse a Alhama. Tal vez el gran esfuerzo
que debió de realizar en sus intervenciones en la Asamblea
de Unión Republicana que se celebró a finales
de junio -en la que presentó su renuncia a pesar de
reiterársele la confianza- y sus intensos discursos
en el Congreso que iniciaba un nuevo período parlamentario
tras elecciones -los republicanos obtuvieron 32 escaños-,
aconsejaban que buscara un descanso más alejado de
las obligadas visitas que hubieran supuesto la estancia en
su pueblo natal (36). No duró muchos
su descanso, ya que a principios de septiembre reemprendería
de nuevo la actividad política (37).
En 1908, aunque se había anunciado que Salmerón pasaría unos días en Alhama, con la intención de restablecerse en su pueblo natal de su delicada salud (38), circunstancias entre otras relacionadas con una enfermedad del colono de la "Huerta Rosalía", la familia no vio conveniente su estancia en ella, por lo que finalmente optó por trasladarse a una pequeña localidad francesa de Pau, llamada Billère (39). Allí, en la Ville Les Elfes, Nicolás Salmerón, rodeado de su esposa y varios de sus hijos, fallecía a las cinco y cuarto del domingo 20 de septiembre. La fatal noticia constituyó un duelo nacional. También en su pueblo natal supuso una gran consternación, desplazándose una Comisión del Ayuntamiento a Madrid para proponer a la familia que el cadáver de su hijo predilecto fuera trasladado a su pueblo natal (40). |
NOTAS:
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Véase su biografía en El Eco de Alhama N° 17 (2004): García Ramos, J.A. y Marín Martínez, P. La "llama viva" del republicanismo español durante el siglo XIX en las biografías de dos médicos almerienses: Francisco Salmerón López (1786-1874) y Gaspar Molina Capel (1817-1873).
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Crónica Meridional de fecha 5 de marzo de 1874.
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Crónica Meridional de fecha 25 de marzo de 1874. Llegó a Madrid el día 20.
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Desde el día 6 de enero de 1891 y casi a diario la Crónica Meridional informaba del recorrido que iba realizando y de la visita que realizaría Salmerón a Almería y a Alhama. El 29 de enero encontramos la última referencia a este.
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Así se manifiesta
en el artículo de Fernando Martínez López:
Del sufragio Universal a la Solidaridad. Salmerón
en la Política Republicana Almeriense (1969-1908). En
Nicolás Salmerón y Alonso (1837-1908). Semblanzas.
IEA y Unicaja. Almería, 1903. También en ese mismo
artículo se reproduce el ejemplar de El Ferrocarril
de 23 de enero de 1892, indicándose un comentario
denominado "Salmerón en Alhama". Creemos que
es una reflexión que se realiza sobre su visita de 1891.
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Crónica Meridional
de fechas 23 de enero de 1901, donde se dice que le acompañaban
Antonio Marín Cadenas, Nicolás López López,
Manuel Rodríguez y el redactor corresponsal Enrique López
Morales, y de fecha 25, bajo el titular "Salmerón
en Alhama". Una más amplia referencia a este viaje
se encuentra en el libro de Mª Carmen Amate Martínez,
"Alhama de Almería. Perfil de su historia".
Pp. 225-227. Ayuntamiento de Alhama de Almería.
2007.
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El Regional de fecha
7 de agosto de 1901. Según apuntaba el corresponsal,
Francisco López Gómez, quien no escatimó
entusiasmo y epítetos en su relato. Comentaba al respecto:
nunca con más gusto que hoy cumplo con mis deberes
de corresponsal
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Dicen los lugareños, como proeza digna de singulares acontecimientos, que a un vagón del tren que contenía todo el equipaje de la familia, varios mozos del pueblo lo sacaron de la vía, le cambiaron las ruedas y lo remontaron hasta Alhama. Pudiera tener parte de verdad y parte de leyenda, realmente los servicios ferroviarios de entonces disponían de unas diligencias para estas ocasiones que iban sobre un vagón.
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El Regional de fecha 4 de septiembre de 1901.
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El Regional de fecha 6 de septiembre de 1901.
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El Regional de fecha 9 de septiembre de 1901. A la misma asistieron representantes de todas las fuerzas republicanas de la capital (Partido Progresista, Federales y Partido Centralista).
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El Regional de fecha 13 de octubre de 1901.
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El Radical de fecha
24 de septiembre de 1902. Se indica que en Gádor se subieron
al tren para acompañar a Salmerón y su esposa
su distinguida familia de Alhama, la bella señorita
de Lozano, Sres. Lozano,
Antonio Marín, Guillermo Rodríguez.y el médico Ibáñez. El trayecto desde Alhama a Gádor se hizo en 39 minutos.
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Ya El Regional desde
el 16 de septiembre de 1902 comenzaba a anunciar la visita de
Nicolás Salmerón y los reparativos para hacerle
un homenaje, ya que, como se decía en el de fecha 25
de ese mes, hacía once años que no había
vuelto a Almería y donde se Indicaba que las personas
más ancianas recuerdan haber presenciado un solo espectáculo
tan grandioso como el que ayer ofreció el pueblo de Almería:
el incomparable recibimiento que hace once años se tributó
al honorable patricio... . A diario se daba puntual información
de los actos celebrados el día anterior o esa misma mañana.
También se hizo eco de los actos La Crónica
Meridional y sobre todo El Radical (Diario Republicano,
que nació con los preparativos de esta visita de Salmerón).
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El Regional de fecha 13 de octubre
de 1902.
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El Radical de fechas 15 y 20 de octubre, 10 de noviembre, 4, 5, 6, 8, 9,12 de diciembre de 1902. Con fecha 3 de enero de 1903 se publica la resolución del recurso por parte del Ministro de la Gobernación, ordenando fueran repuestos en sus respectivos cargos los concejales Manuel Burgos, Antonio Martínez, José Rodríguez y Juan López.
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El Radical de fechas
7 y 13 de noviembre de 1902. En ellos Juan Company, médico
de Alhama, iniciaba su presencia en la prensa con artículos
denominados Humanidad Nueva y Los peligros del
alcoholismo, ejemplo palpable de ese espíritu regeneracionista
que el propio Salmerón representaba.
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Todos estos detalles son
expuestos por el director de El Radical -creemos que
José Jesús García-en el número del
día 6 de agosto de 1903, tras viajar desde Almería
para visitarle junto a su hijo Nicolás y el Sr. Telles
el día 4. Se dice también que el día anterior
algunos correligionarios le esperaban en Gádor y, al
percatarse de lo ocurrido, se desplazaron al encuentro de Salmerón
y le acompañaron hasta Alhama. Una de las impresiones
de este director era ésta: su aspecto es el de un
hombre fuerte, equilibrado y feliz. No se nota en su semblante
la huella del cansancio intlectual. No hay más que verlo
para pensar que el retiro estival de Alhama no es para Salmerón
un sanatorio, al cual venga a recuperar fuerzas perdidas.
Aquí le traen afectos del alma, recuerdos de niño,
un instinto previsor que en él despierta la idea de un
gran deber: el de conservarse fuerte y útil para la patria
y para los suyos...Salmerón en Alhama conviértese
en un gran niño; pero no se le hable de política.
Cuando esto ocurre opérase en él, a la vista del
espectador, una nueva transformación y aparece de súbito
el gran hombre con sus juicios implacables, su frase escultural
y su gran entusiasmo de luchador joven.
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El Radical de fecha 11 de agosto de 1903.
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Todos ellos eran presentados a Salmerón a través de los republicanos de Alhama, Emiliano Rodríguez y Diego Mercader.
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Así se indicaba en un comentario desmintiendo que Salmerón se encontraba enfermo en El Radical de 27 de agosto de 1903. Se decía que su familia se había trasladado a Almería con motivo de los festejos estivales que se estaban celebrando y que realizaba a pie y sin cansancio largas excursiones a los sitios más pintorescos de Alhama.
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El Radical de fecha
2 de septiembre de 1903. Los presidentes honorarios eran Nicolás
Salmerón y Alonso y Manuel Rodríguez Gil (mayor);
presidente efectivo, Anacleto Rodríguez Rodríguez,
vicepresidente, Manuel Rodríguez Wandosell; tesorero
y vocales con derecho propio, Isidoro Casado López y
José Rodríguez Mercader; Vocales, Antonio López
Calvache, Manuel Rodríguez Mercader, Luis Martínez
Picón, José Mazo Gálvez, Eleuterio Rodríguez
Gil, Vicente Casado López, Nicolás Martínez
Miguel y Nicolás López Pascual; Secretario, Guillermo
Rodríguez López; vicesecretario, Cecilio Mercader
Sánchez; representantes en la provincia, José
Jesús García y Emiliano Rodríguez Mercader.
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El Radical de fecha 13 de septiembre de 1903.
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La Crónica Meridional de fecha 6 de agosto de 1904.
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La Crónica Meridional de fecha 9 de agosto de 1904. En ella se indicaba que fueron 700 las personas que se desplazaron. Quizás nunca como hasta entonces el pueblo vio llegar tal cantidad de personas en un solo día. En Santa Fe fueron recibidos por el presidente del Comité Republicano de Alhama, Cristóbal Rodríguez Artés. En esta ocasión Salmerón invitó a cenar en su casa a los expedicionarios más significativos, como Plácido Langle, José Jesús García, Rafael García Duarte (médico oculista que se había desplazado desde Granada) y Manuel Pérez García.
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La Crónica Meridional de fecha 13 de septiembre de 1904. Así se recoge de unas manifestaciones de Salmerón, que con motivo de dicha visita aparecieron en La Tierra de Cartagena.
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El Radical de fecha 1 de octubre de 1904. Se informa del viaje de los republicanos madrileños, presididos por Salmerón, a Barcelona. Durante el recorrido, en todas las estaciones de tren les recibían comisiones de republicanos bajo el himno de la marsellesa. En Barcelona visitó en esta ocasión, como tenía prometido, el antiguo Distrito de las Afueras, donde cosechó en varias ocasiones tantos apoyos electorales.
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El Radical de fecha 11 de octubre de 1904.
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El Radical de fecha 5 de octubre de 1904. Fue después de una comida tras dar un discurso en un mitin republicano.
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El Radical de fecha 12 de septiembre de 1905. En el mismo periódico se indicaba una cosa y otra.
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El Radical de fecha 15 de septiembre de 1905. Entre ellos se encontraba el de Rosalía Salmerón, Mizzi, Juan Tovar, Anacleto y Emiliano. En ese mismo día se publicaba una carta de Salmerón criticando las dificultades puestas por los caciques y el gobierno a los candidatos republicanos para frenar su ascenso, donde consiguieron 30 actas, dos menos que en 1903.
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El Radical de fecha 27 de septiembre de 1905. Indicaba que Salmerón
gozaba de excelente salud y hacía
largas excursiones a pie.
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El Radical de fecha 10 de noviembre
de 1905. Salmerón recibía de Company desde Alhama un telegrama
que decía:: Junta municipal le expresa su vivo agradecimiento por su
eficaz cooperación en pro consecución triunfo Jesús García, con lo que
se ha satisfecho ansiada aspiración
de esta querida provincia, por cuya
redención abogaremos sin descanso.
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El Radical de fechas
20, 21 y 22 de agosto de 1906. Allí se indicaba que a
primeros de septiembre se trasladaría a la Huerta de
Alhama, permaneciendo allí hasta el inicio de la actividad
parlamentaria, donde el partido republicano de la capital ya
programaba un acto público de propaganda. También
se indicaba que antes de volver pasaría tres o cuatro
días en Paríspara visitar a varios ilustres
políticos y profesores franceses, antiguos amigos de
la época de emigración, como el ministro
de interior francés, Mr. Clémenceau, con quien
le unía una gran amistad..
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El Radical de fecha
24 de agosto de 1906. El joven ingeniero de caminos iba acompañado
desde Almería a Alhama por su amigo Anacleto Rodríguez.
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Quizás se fue a descansar a un chalet ubicado en la Isla de la Arenilla, de la localidad de Cadaqués (Gerona), aprovechando el ofrecimiento que le hacían los republicanos de dicha localidad, según se indica en El Radical de fecha 2 de julio de 1907.
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Y entre el 5 y 10 de octubre realizó
un viaje a La Coruña y el 24 de
ese mismo mes llegó a Sevilla,
donde cayó enfermo, recomendándole los médicos que permaneciese por algunos meses alejado de
la política. Una vez restablecido,
regresó a Madrid el 11 de noviembre.
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El Radical de fecha 20 de junio de 1908. En un telegrama del 19 se decía que Salmerón llegaría a Alhama entre el 20 y el 25 de ese mes. Y en El Radical de fecha 23 se indicaba entonces que un grupo de excursionistas almerienses tenían previsto para el día 28, domingo, hacer una excursión a Alhama y, aprovechando su estancia en ella, saludarían a Nicolás Salmerón.
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El Radical de fecha 25 de julio de 1908. El telegrama que anunciaba el viaje estaba fechado en Madrid el día anterior al señalado. En el mismo diario de 28 de ese mes se anunciaba que Salmerón, tras su regreso de Pau pasaría unos días en el domicilio del diputado republicano catalán, Sr. Junay.
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El Radical de fecha
24 de septiembre. En él se indica que a las ocho de la
mañana del día 21 se supo la noticia en Alhama,
reuniéndose el Ayuntamiento y acordando por unanimidad
que para ese fin una Comisión fuese a Madrid, compuesta
por el Alcalde, el concejal republicano Emiliano Rodríguez,
y el secretario. Se indicaba que el comercio cerró
sus establecimientos, que se enlutaron los círculos
políticos y de recreo y que el duelo era inmenso.
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