Editorial
Un aire festivo impregna las calles de Alhama. En
ese ambiente de fiesta, como cada año por estas fechas, un nuevo
número de El Eco de Alhama llega a las manos de cada uno de los
lectores a modo de fiel espejo de la vida social y cultural del
pueblo. Y lo hace con la ilusión de volver a ofrecer nuevos aspectos
de la historia y de la vida del municipio, con la pretensión de
que el mejor conocimiento de nuestro pasado y de nuestro presente
nos haga reflexionar acerca de lo que fuimos y de lo que somos,
para entre todos encarar el futuro de la forma más satisfactoria.
Somos conscientes de que Alhama vive una etapa de
intensa modernización y desarrollo, producto de su expansión social
y económica que queda patente en las transformaciones que día
a día se producen en el municipio. Cabría señalar que nos ha correspondido
vivir una etapa de cambios, en algunos aspectos, con cierta semejanza
a los vividos por nuestros antepasados, los alhameños de los años
primeros del pasado siglo XX, que, con la introducción de un nuevo
cultivo, la uva del barco, vieron transformada su economía y como
resultado, la imagen del pueblo.
Participamos de la idea de que todo proceso de cambio
debe de llevar paralelo el ejercicio de la reflexión con el fin
de que cada una de las transformaciones acaecidas vayan encaminadas
a mejorar nuestro entorno en sus múltiples facetas: ambientales,
culturales, sociales, y un largo etcétera.
Por fin, tras un corto paréntesis, los contenidos
de los catorce números de El Eco de Alhama se encuentran
de nuevo en Internet. Si tenéis interés en visitar sus páginas,
solo con acceder a http://www.ecoalhama.es.vg os podéis
adentrar en la imagen del pasado y del presente de Alhama y de
su comarca. El desinteresado esfuerzo de nuestros colaboradores
informáticos ha hecho posible, una vez más, que la revista de
Alhama pueda ser consultada por todas aquellas personas, que aun
en la distancia, sientan necesidad de acercarse a la vida cotidiana
del pueblo y de sus gentes a través de sus contenidos.
Hemos tratado, en este nuevo número de El Eco,
de ofrecer una serie de trabajos que, desde el marco de la pluralidad,
resulten de interés para los lectores. De este modo, se han recuperado
del olvido las biografías de algunos personajes singulares estrechamente
vinculados con el pueblo. Es el caso del médico republicano Juan
Company y también las pinceladas de la vida y la obra de Tito
Salmerón, hijo de nuestro ilustre paisano don Nicolás. Mucho
más próximo en el tiempo es el recuerdo dedicado a Dña. Socorro,
maestra de varias generaciones de párvulos del municipio. Trabajos
sobre la agricultura ecológica y sobre la situación de la ganadería
en nuestro medio nos aportan una visión de algunos de los sectores
productivos.
Los temas referidos a la salud, al cuidado de nuestro
cuerpo, y especialmente los aspectos preventivos, ocupan, además,
un espacio destacado entre los contenidos de El Eco. Profesionales
de la salud, especialistas en cada uno de los temas abordados,
nos ofrecerán una visión clara y sencilla de las patologías que
presentan mayor incidencia en la población española de este siglo
XXI. Sus orientaciones nos permitirán modificar una serie de hábitos
que, en muchos casos, resultan poco favorecedores para una vida
sana.
Para finalizar, aprovechamos la oportunidad que
nos brindan estas líneas de El Eco y agradecer la desinteresada
colaboración de todas aquellas personas, entidades e instituciones
que año tras año apoyan este proyecto cultural. Entre todos, hacen
posible que la revista de Alhama acuda fiel a su cita.
Así mismo, desde el Equipo de Redacción de El
Eco de Alhama, no queremos dejar de desearos unas Felices
Fiestas Patronales, con el deseo de que esos días festivos sean
fechas de encuentro entre familiares y amigos, fechas de disfrute
y amistad.